El Parlamento británico vota el plan de Johnson para romper el acuerdo del Brexit
LONDRES, INGLATERRA, (Reuters) – El plan del primer ministro británico, Boris Johnson, de incumplir partes del acuerdo de divorcio del Brexit con la Unión Europea, lo que implicaría además violar el derecho internacional, se enfrenta el lunes a una votación en el Parlamento en medio de una creciente oposición dentro de su propio partido.
La Cámara de los Comunes debatirá el lunes el proyecto de ley sobre mercado interior, que la UE ha exigido que Johnson descarte antes de finales de septiembre. Tras el debate, los legisladores decidirán si debe pasar a la siguiente etapa. La votación podría llegar a última hora de la jornada.
La decisión de Johnson de violar explícitamente el derecho internacional ha sumido al Brexit en otra crisis cuando faltan menos de cuatro meses para que finalice el periodo de transición y el Reino Unido abandone definitivamente la UE.
La UE ha acelerado los preparativos para una salida sin acuerdo mientras que Londres ha rechazado el ultimátum de Bruselas para que descarte, antes del final de septiembre, las partes principales del proyecto de ley.
Johnson, que cuenta una mayoría de 80 escaños en la cámara Baja del Parlamento, se enfrenta al creciente descontento de algunos miembros de su partido, mientras que los ex primeros ministros John Major, Tony Blair, Gordon Brown, David Cameron y Theresa May han expresado su inquietud por el plan.
“Cuando el ministro de la reina da su palabra en nombre de ella, debe cumplirla, aunque las consecuencias sean desagradables”, dijo el ex fiscal general de Johnson, Geoffrey Cox, en declaraciones al diario The Times.
“Ningún ministro británico debería comprometerse solemnemente a cumplir las obligaciones del tratado con los dedos cruzados a la espalda”, dijo Cox, que fue despedido por Johnson en febrero.
El Gobierno argumenta que el proyecto de ley -que explícitamente indica que podría ser incompatible con una serie de leyes internacionales- se limita a aclarar ambigüedades. Añade además que está comprometido con el tratado del Brexit, aunque su principal prioridad es el acuerdo de paz de Irlanda del Norte de 1998 que puso fin a décadas de violencia.